Este verano ha sido atípico, por varios motivos. Ha habido el tiempo suficiente para descansar y refrescar todas las ideas que andan pro ahí, pero también ha sido corto el periodo de disfrute de ellas. Se puede resumir en mucho pensar y reflexionar y poco disfrutar, las circunstancias obligaron a ello.
A partir de ahora estamos volviendo poco a poco a la rutina, y es buena hora para aplicar todo aquello que se ha pensado y reflexionando durante el verano.
Ya llegado la hora y esto comienza ya. Sabe dios como puede acabar esto.
A partir de ahora estamos volviendo poco a poco a la rutina, y es buena hora para aplicar todo aquello que se ha pensado y reflexionando durante el verano.
Ya llegado la hora y esto comienza ya. Sabe dios como puede acabar esto.