lunes, 30 de enero de 2012

Todo el mundo crece

Hoy os voy contar una anécdota. Algo que presencié en un pabellón de fútbol sala no hace muchas semanas. Era ya a la salida del partido, volviendo desde la zona de vestuarios, en ella me encuentro a una niña junto con, probablemente, su abuelo que iba a buscarla al vestuario. Esta niña era la única dentro de un equipo de niños, tras jugar con su equipo ante las niñas del equipo Benjamín del Comarcal A Fervenza.

La conversación entre la niña y su abuelo fue así:

- NIÑA: Hemos perdido ante un equipo de niñas. Esto no puede ser.
- ABUELO: ¿Por que dices que esto no puede ser?
- NIÑA: Porque no nos pueden ganar unas niñas. Los niños deberían ganar.
- ABUELO: Pero tu eres también una niña. Cuando seas más mayor tendrás que jugar con ellas.
- NIÑA: Pero los niños siempre son mejores, por eso juego con ellos.
- ABUELO: Ahora piensas así, pero ya verás que con el tiempo no pensarás igual. Crecerás igual que lo hicimos todos.

Esta conversación me sacó una sonrisa más por lo llamativo de quien lo decía que por el contenido de la misma. Y como decía el abuelo: Todo el mundo crece y las cosas cambian.